Diabetes Tipo 2

La diabetes tipo 2 es una condición crónica que afecta la forma en que el cuerpo procesa el azúcar en la sangre, o glucosa, que es nuestra principal fuente de energía. A diferencia de la diabetes tipo 1, donde el cuerpo no puede producir insulina (la hormona que regula el azúcar en la sangre), en la diabetes tipo 2, el cuerpo todavía produce insulina, pero no puede usarla eficientemente.

Características principales:

Resistencia a la insulina: El cuerpo no responde bien a la insulina, lo que hace que el azúcar se acumule en la sangre en lugar de ser utilizado como energía.
Desarrollo gradual: Puede desarrollarse a lo largo de muchos años y es comúnmente precedida por una condición conocida como prediabetes, donde los niveles de azúcar en la sangre son altos, pero no lo suficiente para ser diagnosticados como diabetes.
Síntomas sutiles: Incluyen sed excesiva, fatiga, visión borrosa y cicatrización lenta de heridas. Muchas personas pueden no tener síntomas notables al principio.
Factores de riesgo: Sobrepeso, inactividad física, dieta poco saludable y genética.

¿Por qué debería importarte? Controlar la diabetes tipo 2 es crucial porque, si se deja sin manejar, puede llevar a complicaciones serias como enfermedades cardíacas, daño renal, problemas de visión y daño nervioso. La buena noticia es que se puede gestionar y, en algunos casos, incluso prevenir con cambios en el estilo de vida, como mejorar la dieta, aumentar la actividad física y mantener un peso saludable. La atención a tu alimentación y ejercicio no solo puede prevenir la aparición de la diabetes tipo 2, sino que también puede significar una enorme diferencia en tu calidad de vida si ya has sido diagnosticado.